Emely Tueni
MADRID,España.-
En los Estados Unidos y Europa existen movimientos de padres que equivocados, o no, se niegan a que sus hijos sean vacunados contra enfermedades, que actualmente, algunas de ellas, han sido erradicadas en muchas naciones, argumento, que algunos progenitores alegan para no permitir que su prole sea inmunizadas, por ejemplo de la poliomielitis, una enfermedad infecciosa que hace unas décadas afectó a miles de niños de los cuales muchos murieron, y otros dañados con parálisis grave de por vida.
Ante este panorama de negación, que crece con más frecuencia, los médicos pediatras recuerdan e insisten la importancia de vacunar a los niños, pues les protege de una serie de enfermedades como el tétano, la difteria, varicela, hepatitis, hepatitis B, sarampión y otras.
Sin embargo, algunos padres están aferrados a la idea de que las vacunas pueden resultar ser un arma de doble filo, alegando que se han producido casos en los que los daños han sido mayores que la prevención, recordando que no todos los organismos son iguales.
Ellos se basan, en que hoy día, existen una serie de enfermedades que años atrás no eran frecuentes, y ahora tienen una mayor presencia por culpa de las inmunizaciones.
El número de padres negado a vacunar a sus hijos es respetable, de tal forma, que la instituciones de salud se han visto obligadas a realizar campañas para desmontar la creencia de que las vacunas son dañinas y que son las causas de muchas enfermedades infantiles.
Los médicos dicen que todas estas suposiciones no tienen fundamento alguno, que es lo contrario, pues las vacunas han salvado la vida de millones de Infantes, aunque reconocen que en algunos niños al ser inmunizado han sufrido reacciones negativas..
Ante esta situación, la Organización Mundial de la Salud alerta que de no vacunar a los infantes en pocos años reaparecerían las enfermedades que habían sido erradicadas como las mencionadas.
La OMS insisten en que el agua potable y las vacunas son las dos estrategias que más vidas ha salvado en este planeta.
Los miedos y los prejuicios de algunos padres, entre ellos los naturistas, pues están convencidos de que las vacunas son un gran negocio de los laboratorios farmacéuticos,y que muchas enfermedades de años atrás, ahoras no son tan peligrosa, debido a que existe una mayor higiene general, y que también pueden curarse con medicamentos naturales.
De todas formas, en diversos países la vacunación es obligatoria y gratuita. En este tema puede aplicarse el refrán de: Palo si boga, palo si no boga.