Emely Tueni
La población dominicana sufre con mayor frecuencia enfermedades producidas por virus gripales, parasitosis intestinales, o picaduras de mosquitos, que alteran la salud, la vida cotidiana de un alto número de personas de la población adulta como la infantil.
Caer en las garras de estos virus, epidemias, se ha convertido en el pan nuestro de cada día. Son pocos los hogares donde no exista un afectado que haya necesitado servicios de urgencias de hospitalización por mostrar síntomas diversos de afecciones que han existido siempre, pero, no de manera constante como viene ocurriendo.
Los tormentosos virus gripales, los peligrosos brotes de dengue, las terribles chikungunya, zica, la parasitosis intestinal, son problemas de salud de los que se habla a diario, las quejas se escuchan por doquier, no importa la clase social, ricos o pobres, todos sufrimos los padecimientos de los vómitos, diarrea, dolores estomacales o las torturas que afectan las articulaciones, añadidas con altas fiebres y dolores de cabeza, hacen enloquecer a cualquier humano.
Las bajas en los puestos de trabajos, en los colegios son notarias, debido a estas enfermedades que algunas pueden llegar a ser mortal, como el dengue que en la última década ha matado a decenas de niños y adultos, ó las afecciones del pulmón y bronquios. Una simple gripe mal tratada puede convertirse en una bronquitis, neumonía de curación delicada.
La gente tiene terror a estas enfermedades, y tienen la percepción de que las medidas sanitarias que se llevan a cabo no son suficientes para rebajar las incidencias, pues cada día, nuestro país, tiene más personas migrantes que viven hacinadas, en lugares insalubres, muy pobres, muchos de ellos con escasas costumbres higiénicas, defecando, orinando en cualquier lugar. Lo peor de todo es que estas personas, trabajan manipulando alimentos, vendiendo frutas, vegetales, comestibles que son fuentes de gérmenes y bacterias.
Nuestro país, en varias ocasiones ha estado en alerta por epidemias de cólera, somos vulnerable a esta enfermedad de padecimientos gastrointestinales. Es de suma importancia llevar a cabo las precauciones necesarias, como lavarse las manos luego de hacer necesidades fisiológicas, lo mismo antes de cocinar, igual tratamiento con las frutas, verduras lavar bien con vinagre blanco o cloro, sobre todo, las comidas crudas. Cuando se come fuera del hogar es preferible no consumir ensaladas, salvo que se tenga la seguridad que el restaurante escogido se distingue por su higiene y la buena manipulación de los alimentos que oferta.
El consumo de agua debe ser segura pues los virus, brotes de no ser tratados a tiempo pueden producir la muerte, principalmente en personas envejecientes y niños, quienes son los más débiles. Si se necesita tomar medicamentos deben ser indicados por los médicos especialistas, pues auto medicarse puede resultar fatal.
Entendemos que las medicinas en nuestro país tienen costos demasiado elevado. Medicamentos que se pueden obtener fuera del país por valor de 700 pesos dominicanos, cuestan hasta cinco mil pesos. De todas formas, la clase menos pudiente puede ir a las boticas populares, aunque muchas veces no están bien abastecidas, sin los medicamentos que alguna persona en particular pueda necesitar, de una manera general cumplen una función social buena en el suministro económico de medicamentos a la población menos pudiente.