El Gobierno sueco presentó un proyecto para prohibir fumar en lugares públicos como terrazas de bares y restaurantes, paradas de autobuses, parques, andenes y recintos deportivos.
“Necesitamos proteger a nuestros niños y jóvenes y ‘desnormalizar’ el uso del tabaco en el espacio público”, declaró la ministra de Asuntos Sociales, la socialdemócrata Annika Strandhäll.
El Ejecutivo sueco ya ha enviado al Consejo Legislativo el proyecto, con el objetivo de presentar en el Parlamento una proposición de ley a finales del mes próximo.
Aunque el Gobierno rojiverde de coalición entre socialdemócratas y ecologistas no tiene mayoría, Strandhäll se mostró convencida de que la iniciativa contará con el apoyo suficiente en la Cámara.
El plan es que entre en vigor dentro de un año y que Suecia sea un país libre de tabaco hacia 2025.
Suecia se convirtió en junio de 2005 en uno de los primeros países del mundo -después de Irlanda, Noruega, Italia y Malta- en prohibir fumar en restaurantes, cafés y bares, aunque se habilitaban áreas reservadas para fumadores.
Este país escandinavo ya había aprobado en 1993 una normativa que impedía fumar en instituciones públicas y, un año después, en los puestos de trabajo.