Emely Tueni
MADRID, España.-
La semana de celebraciones del colectivo LGTB culminaron con el desfile del Orgullo Gay, que recorrió varias calles céntrica de la capital española, al igual que en Barcelona, con la participación de decenas de carrozas decoradas con alegorías propias de la ocasión, y la asistencia de miles de locales, y extranjeros gays, lesbianas, bisexuales, transgéneros, y también, heterosexuales que apoyan al LGTB , o simplemente desean participar en las fiestas con tintes carnavalesco, para ver las actuaciones de artistas famosos.
La semana del orgullo gay, se ha extendido a varios países con libertad de escoger orientaciones sexuales diferentes. En algunas naciones la homosexualidad es reprimida, y las personas del LGTB tienen que ocultarlo por temor a perder la vida, o maltratos físicos y psicológicos, pero, a veces sucede que en los mismos lugares donde es aceptada la escogencia sexual diversas, algunos intolerantes, atacan a los LGTB, de manera cruel, con burlas y golpes.
Desde que el mundo, es mundo, siempre ha existido la homosexualidad, ha sido un tema tabú por diferentes motivos como familiares, vergüenza, temor al rechazo, pero, las cosas han ido cambiando y como dicen popularmente, los LGTB han salido de los armarios, aunque, todavía muchas gente no se atreve, siendo los más temerosos, los políticos y deportistas, quienes muchas veces se casan con heterosexuales para tapar su condición, engendran hijos, y así tratan de engañar a la sociedad.
Algunas personas dicen que la homosexualidad está de moda, y que muchas gente que no lo son, hoy día, se han convertido en bisexuales, una anarquía sexual, sin código, ética moral. En nombre del placer carnal, les da lo mismo todo.
El escritor Richard Cohén, un ex gay, manifiesta que la ciencia dice que la gente no nace gay. Esto lo explica en su libro «Comprender y Sanar la Homosexualidad», que fue retirado del Corte Inglés a petición de agrupaciones homosexuales, una intolerancia a la libre expresión.
Lo cierto es, que muchas personas si nacen con condiciones homosexuales. Desde la niñez, se les observa una clara tendencia sodomista o lésbica, y la sociedad está en el deber de comprenderlos, y aceptarlos. Otros, nacen hetereosexuales, pero luego, por aberrantes depravaciones sexuales entran a formar parte del LGTB, estos últimos, son degenerados sexuales.