El Real Madrid busca técnico desesperadamente. Aturdido tras la desmoralizadora derrota que sufrió ante el Barcelona y rezagado en la Liga española, el Madrid necesita encontrar a alguien que enderece el rumbo y salve su temporada.
El argentino Santiago Solari, un ex jugador del club y actual entrenador del Madrid, quedó a cargo de forma provisional y dirigió el entrenamiento del martes previo a su debut en la Copa del Rey.
Lo imperativo es frenar la espiral de malos resultados.
Menos de cuatro meses después de su nombramiento en el cargo, el Madrid despidió a Julen Lopetegui al advertir que se tenía que hacer algo para “cambiar la dinámica en la que se encuentra el primer equipo, cuando aún son alcanzables todos los objetivos de esta temporada”.
El comunicado de la junta directiva del club subrayó que “existe una gran desproporción entre la calidad de la plantilla del Real Madrid, que cuenta con ocho jugadores nominados al próximo Balón de Oro, algo sin precedentes en la historia del club, y los resultados obtenidos hasta la fecha”.
Durante el breve ciclo de Lopetegui, el Madrid ganó seis partidos, perdió seis y empató dos. El club marcha noveno en la clasificación, siete puntos del líder Barcelona tras 10 jonrones. Está más cerca de los puestos de descenso.
No ha quedado claro el tipo de técnico que el Madrid busca. ¿Alguien de mano dura como Antonio Conte? ¿Quizás alguien más una mano más blanda como Roberto Martínez. Al equipo le fue bien con la serenidad de Zinedine Zidane, consagrándose en las tres últimas ediciones de la Liga de Campeones. Pero el legendario francés contaba con Cristiano Ronaldo. Ambos se marcharon al final de la pasada temporada.
“El respeto se gana, no se impone”, advirtió el capitán Sergio Ramos tras la derrota 5-1 en el clásico el domingo. “Ni un nombre ni otro. Hemos ganado todo y es más importante la gestión del vestuario que el conocimiento técnico”.
El club blanco puede volver a intentar con una solución interna. Solari ha seguido el mismo camino de Zidane, su ex compañero de equipo y también entrenador de la filial cuando fue llamado tras el despido de Rafael Benítez.
“Dejémosle en paz, es una de las figuras más grandes que hemos tenido en el Real Madrid y no le podemos adjetivar”, señaló Solari el martes. “Hay que dejarle tranquilo en su grandeza y no dedicarnos a comparar a nadie con él porque es incomparable”.
Solari estará en el banquillo el miércoles, cuando el Madrid visitará al Melilla de la tercera división en el torneo de copa. Su siguiente compromiso liguero será de local ante el Valladolid el sábado.
“Estuve con el equipo y no miran con recelo a nadie”, afirmó Solari. “Están dolidos y con ganas de ganar, así les sentí. Este es un equipo de campeones, de guerreros, que han luchado mucho por el club y le han dado mucho. Este es un momento más delicado, pero es en los que sale y se ve el carácter”.
Fuente: AP