Homero Luciano
Con la presente entrega, nos permitimos concluir, el breve bosquejo del origen del nombre de la ciudad de Orlando, que iniciamos la pasada semana, y que, como dije anteriormente, hemos recogido de “Una travesía de magia, sol y fantasía”, que no es más, que una guía práctica, y que gracias al departamento de publicaciones de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, fue puesta en circulación, en la recién finalizada Feria del Libro de Santo Domingo.
En esta entrega, es oportuno resaltar, que la historia de esta ciudad se remonta en el siglo XIX, concretamente al año 1838, cuando el ejército americano construyó un fuerte defensivo de Fort Gatlin, para protegerse de los ataques de los nativos (los denominados «indios»- Indians).
En esos años, se había creado una pequeña comunidad alrededor del fuerte, conocida como «Jernigan», el primer asentamiento permanente de la zona. Más tarde, en 1857, la comunidad cambió su nombre y pasó a llamarse Orlando.
Por qué le llamaron Orlando?… He aquí el otro relato.
“De acuerdo a varios reportes históricos, se registra que los primeros pobladores que llegaron a este lugar, hallaron un habitad a 48 kilómetros hacia el norte, de donde hoy está la ciudad, y ahí encontraron la tumba de Orlando Reeves, quien supuestamente falleció en una guerra contra indios que habitaban esta zona llamados Seminolas; y decidieron llamarla del mismo nombre: ¡ORLANDO!
Por otro lado la Enciclopedia Libre Wikipedia señala que: “Parece, sin embargo, que Orlando Reeves (a veces Rees) operaba un molino de azúcar y plantación de azúcar a unas 30 millas al norte de Spring Garden, en el condado de Volusia. Colonos pioneros encontraron su nombre tallado en un árbol como Orlando Acosta y asumieron que era como un marcador para su tumba.
Posteriormente, hicieron referencia a la zona como «la tumba de Orlando Acosta» y más tarde, simplemente se recordó como Orlando.
De acuerdo con pruebas escritas, Orlando Acosta también fue un soldado, pero la mayoría de los detalles de su vida son inciertos. Un monumento a orillas del lago Eola designa el lugar donde él supuestamente murió”.
Esta, es la otra versión. Pero independientemente quien, o por quien se le haya puesto el nombre a esta ciudad, lo cierto es, que es un lugar que vale la pena visitar y disfrutar con toda la familia. Recientemente un amigo me dijo; que Orlando, es también, el lugar ideal para envejecer…