De igual forma, recomienda medidas drásticas contra el despliegue comercial de productos derivados del tabaco hacia jóvenes en forma de empaques llamativos, aromas, nuevos sabores e incluso muestras gratis para introducir campañas.
Un informe publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), señala que la mayoría de países del mundo han tenido avances significativos en la lucha contra la epidemia global del tabaquismo, en un proceso creciente que se inició en el 2003, cuando se adoptó el convenio marco para el control del tabaco.
Sin embargo, la agencia advierte que este progreso está amenazado por la industria tabacalera que de manera permanente reinventa formas para atraer nuevos fumadores, obstaculizar la adopción de políticas de control y promocionar nuevos productos como los cigarrillos electrónicos, los dispositivos de calentamiento, posicionándolos como más saludables.
El informe, el séptimo bianual que realiza la OMS, asegura que “este año se centró en la disposición de tratamientos específicos para eliminar el tabaquismo y analizar las amenazas que para la salud pública significan los nuevos productos desarrollados por las tabacaleras”, y deja claro, que estos últimos tienen tanto riesgo como los cigarrillos convencionales, por lo que advierte a los gobiernos sobre la inconveniencia de incluirlos como herramientas para cesar el consumo.
Con cifras claras, el reporte recomienda que cada país debe definir la forma de abordar el problema de los cigarrillos electrónicos y que como mínimo “deberían estar sujetos a las mismas políticas de control del tabaco convencional”.
De igual forma, recomienda medidas drásticas contra el despliegue comercial de productos derivados del tabaco hacia jóvenes en forma de empaques llamativos, aromas, nuevos sabores e incluso muestras gratis para introducir campañas.
Eltiempo