Brisas
Rosa Francia Esquea
rosafranciaesquea@gmail.com
Comparto este hermoso texto que escribió mi querida amiga la historiadora Carmen Durán a propósito de haberse conmemorado el pasado 27 de
febrero un aniversario más del fusilamiento de esa mujer valiente y heroica que fue María Trinidad Sánchez, y de quien dice muy justicieramente la
autora, la gesta de la independencia sesga la dimensión histórica de su vida, su muerte, su obra y
su legado.
“En el imaginario social tu nombre Trinidad aparece sesgado por la historia trágica de tu muerte, la fecha 27 de febrero se traga la dimensión de tu vida, de tu obra, de tu legado y de tu hazaña.
Parece retumbar en los muros de la vieja ciudad colonial el sonido fúnebre de los tambores que acompasaban tu paso hacia la muerte.
Tu muerte más doliente y dolorosa al ritmo de los tiempos, porque parecería heroína sin tiempo, que todavía no ha sido plasmada con justicia tu enorme
dimensión de madre de la Patria.
El 27 de febrero de cada año asistimos a la gala de celebrar nuestro nacimiento como pueblo libre, como nación independiente al concierto del
sacrificio y vocación patriótica de los hombres y mujeres que como tú forjaron la grandeza de esta Patria, sin embargo, cuán lejos está su cristalización
plena, cuan distante de los valores que insuflaste. Trinidad esta mañana revoloteaba por mi mente tu imagen de mujer de pueblo, de tía-madre, de combatiente indeclinable frente al despotismo y el absurdo.
Mujer que no existías como humana portadora de derecho en el entramado de una sociedad en que las que como tú no cabían en las normas y en los cánones elaborados por los hombres.
Fuiste ciudadana moral que trascendió el límite impuesto para ser ejecutada por un código militar que aplicaba el famoso artículo 210 de la carta magna sin ser ciudadana, doble y absurdo crimen.
Trinidad, ¿cómo entender esa lógica?
¿Cómo entender que tus restos venerados reposen justo en el cenáculo de los héroes y heroínas junto a
tu ejecutor?
Trinidad háblame, dime ¿cómo entender este
absurdo?”.
Permítanme reconocer el trabajo valioso y sistemático que hace Carmen Durán para rescatar del olvido a hombres y mujeres que han puesto y
ofrendado sus vidas al servicio de la patria.