Manuel Díaz Aponte
El autor es periodista
Las guerras dejan muertes, destrucción, crisis económicas, divisiones y odio entre la humanidad.
En cambio, los deportes generan alegría , unión y energías positivas.
¿Es posible un mundo de pacificación, convivencia y sin armas de destrucción masiva que solo buscan socavar la especie humana?
En los Juegos Olímpicos se abre un espacio innovador y de lucha tenaz por alcanzar la victoria, pero sin acudir al uso de la fuerza y de imposición violenta.
Cada 4 años, la humanidad vive y disfruta de un evento planetario cargado de fuerza, competitividad y destreza mental que nos pone a todos a confiar en alcanzar un mundo donde reine la paz y la confraternidad.
En Paris, hermosa capital de Francia, se está celebrando la XXXIII Olimpiada, que congrega a 10.500 competidores de todos los continentes. Hasta el momento, Rio de Janeiro, Brasil, que montó exitosamente en 2016 dicho evento posee el récord con 11.238 atletas congregados.
La imagen de la televisión e internet proyectan al mundo los instantes de la feroz competición entre los atletas que buscan la gloria a través de una medalla de oro, plata o de bronce.
Algunos, lamentablemente, ven sus sueños frustrados al intentar violentar los protocolos y dispositivos de seguridad por medio del uso de sustancias prohibidas para aumentar su rendimiento y obtener la deseada presea.
Pero así no vale, hay que jugar limpio y con decoro para enaltecer el deporte y la patria que cada uno de esos atletas representan. Por eso, son cada vez más estrictos los controles que a través de sus técnicos y jueces mantiene el Comité Olímpico Internacional (COI).
En los Juegos Olímpicos París 2024 no participan los atletas de Rusia debido entre otros factores a las pugnas entre esa poderosa nación y occidente por la guerra en Ucrania.
Tras el inicio del conflicto en febrero de 2022, el COI recomendó que se prohibiera a los atletas rusos y bielorrusos competir en eventos deportivos internacionales.
Otro episodio que levantó críticas hacia los Juegos Olímpicos que se exhiben en la capital francesa fue la ceremonia de apertura en una escena donde se promovía abiertamente la agenda LGTB. Lo que evidentemente, deslució dicho evento deportivo, teniendo posteriormente que los organizadores pidieron disculpas.
Igualmente, los niveles de contaminación del río Sena teniendo los organizadores que invertir más de mil 500 millones de euros para poder efectuar los actos de apertura en ese emblemático recurso natural que el ser humano ha deteriorado progresivamente.
Brillantes de las Olimpiadas
Representan un espacio vistoso, atractivo y seguido por millones de ciudadanos alrededor del mundo no tan solo por la competitividad de alto nivel y la diversidad de los deportes sino, además, por sus intrínsecos coloridos que lo convierten en un gran espectáculo para la televisión.
Sorprende la baja cantidad de medallas obtenidas por la delegación de Estados Unidos en esta cita deportiva, superada por China, Francia, Japón y Australia.
República Dominicana no ha conquistado ninguna presea enfocándose en la aspiración del país caribeño en la destacada atleta Marileidy Paulino, quien competirá en la modalidad de 400 metros planos para mujeres.
Sigue siendo determinante para la clasificación y obtención de medallas de oro, plata y bronce el apoyo que cada país otorga a sus atletas.
Las naciones desarrolladas tienen más probabilidades de dominar el medallero olímpico dada su inversión económica en los deportes colectivos e individuales.
Esperanza de medallas de RD
Dado el revés que han tenido las Reinas del Caribe en sus dos primeras presentaciones en la cancha y la sanción a Lisvel Eve Mejía, del equipo dominicano de voleibol, que dio positivo en una prueba de dopaje efectuada en el pasado torneo de la Liga de Naciones, los focos están dirigidos ahora hacia los atletas de las disciplinas de atletismo y boxeo.
Quizás haya posibilidad de escuchar el himno nacional en el podio entre los representantes dominicanos que practican la Halterofilia.
La jinete dominicana Ivonne Losos fue eliminada de las competencias de caballo de pasos finos en París, evidenciando que ya es necesario un relevo en esa disciplina deportiva.
El pueblo dominicano sigue demostrando su pasión por los deportes dándole seguimiento a las transmisiones de las diversas competencias deportivas en estos XXXIII Juegos Olímpicos de París.
No tan solo es el béisbol, el que goza de simpatía entre la población de la República Dominicana, las generaciones actuales disfrutan las demás disciplinas con mucho entusiasmo.