Un viaje en el tiempo a nivel estilístico que nos lleva directas a 1977.
Arranca una nueva semana cargadita de actos y eventos para la reina Letizia. Así, si a lo largo de estos días la veremos en su habitual visita anual a Fitur (donde Letizia brilló el año pasado con un look de Inés Domecq que rompió stocks), y recorriendo el campus de Google en Madrid, esta mañana, tanto ella como el rey Felipe VI han ofrecido al Cuerpo Diplomático acreditado en España, su tradicional recepción con motivo del nuevo año en el Palacio Real de Madrid.
Para la ocasión doña Letizia nos ha sorprendido con la elección de su look, un vestido vintage de Valentino que ha cogido prestado del armario de su suegra, la reina Sofía, quien lo estrenó en 1977 en una visita de Estado a Alemania. Se trata de un vestido formado por un cuerpo de escote redondo y mangas transparentes ligeramente abullonadas, con un delicado bordado de flores en color rosa y con hojas verdes, del mismo tono de la falda, con pliegues en la parte superior.
Como únicos accesorios, ha vuelto a apostar por las joyas, y esta vez, a su inseparable anillo de Karen Hallam (regalo de sus hijas) se unen unos preciosos pendientes con dos piedras, una magenta y otra de color verde, a juego con el vestido.
No es la primer vez que la reina doña Letizia lleva prendas del exclusivo armario de la reina Sofía. En septiembre del año pasado, con motivo del almuerzo en honor del presidente de la República de Chile, Sebastián Piñeira, Letizia pidió a la Reina un precioso vestido floral que había lucido la monarca hacía 40 años.
Worman Madame