Por María Fals
M.A.Crítica e Historiadora del Arte
Josías Mercedes es oriundo del Distrito Nacional de Santo Domingo. Nació en la no muy lejana década del 70 y creció en un ambiente cristiano. Cuando pequeño le gustaba pintar lo que veía en los periódicos y a su alrededor.
Siendo niño se traslada a San Pedro de Macorís donde transcurre su infancia y primera juventud. Luego, a los 17 años se marcha a Higüey y allí realiza diferentes trabajos, empezando entonces a desarrollar una carrera sistemática dentro de la pintura en forma autodidacta.
Entre sus temas iniciales se destacaron paisajes y obras con simbologías taínas. Entró más tarde a estudiar en la Escuela Nacional de Artes Visuales y allá recibió clases con diferentes maestros como Franklin Rodríguez, cuyas enseñanzas marcaron su obra.
Es miembro del CODAP y ha participado en diversas colectivas en los salones del Colegio Dominicano de Artistas Plásticos, así como en diferentes galerías y museos. Su primera exposición individual tendrá lugar el próximo 22 de marzo del 2022, bajo el nombre: “Del mito al Logos, génesis del pensamiento.”
Entre los estilos que lo han influenciado se encuentra el impresionismo, la abstracción, la neofiguración y el surrealismo, desarrollando creaciones polisémicas de gran colorido y calidad técnica.
En algunos de sus trabajos figuras biomórficas de tonos ocres se destacan sobre fondos más oscuros, en otros un pez parece besar el alma del que lo observa. Desde un lienzo el ojo del eterno arquitecto del Universo visualiza el futuro, mientras que un ser amorfo y azul da la espalda al porvenir. En otras superficies, monstruos oscuros y polícromos se mueven en ruta hacia si mismos y un ser humano sin ojos “observa” con la lupa del alma un jarrón con flores.
Las transparencias y la disolución de la forma, el excelente manejo del color y de las líneas fluidas crean en la obra de Josías un mundo onírico, en el que se siente poseedor de su propia magia, expresada en un espacio figurado donde todo converge, para renacer en un acto creador de doxas y epistemes, de signos y de símbolos por decodificar.
La mitología propia de su obra ya madura se proyecta en su logos, entendido como principio espiritual ordenador del cosmos, en medio de una mezcla de razón y emoción. Subyace la exploración, la experimentación en ese camino artístico que ha emprendido, que lo lleva a interpretaciones personales y fabulosas de la realidad que le rodea. Sus trazos y tonalidades despiertan el interés del espectador, que busca profundizar en la génesis del pensamiento de este forjador de formas autónomas y divergentes.
Caminando por el sendero de la belleza y la armonía en busca de la unión con la diversidad, predicando el amor como principio y semilla de todas las cosas va Josías dibujando, deslizando sus pinceles sobre lienzos y superficies diversas, para tocar el espíritu de cada uno de nosotros e iluminar desde sus cuadros las paredes y miradas con sus mitos y sueños.