La votación para elegir presidente en Argentina concluyó el domingo en unas elecciones que podrían poner en riesgo la reelección del conservador mandatario Mauricio Macri y dar pie al regreso del kirchnerismo al poder.
Los primeros resultados oficiales se darán a conocer a partir de las 21.00 hora local (0000 GMT).
Las encuestas de boca de urna que difundieron los canales de cable Todo Noticias, C5N y América -las principales cadenas periodísticas- señalaban que el candidato opositor Alberto Fernández, que va acompañado en la fórmula del Frente de Todos por la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), aventajaba a Macri, líder de Juntos por el Cambio.
El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, dijo a periodistas que la jornada electoral “transcurrió mayormente en tranquilidad y paz” al margen de “alguna irregularidad” en localidades de las afueras de Buenos Aires y otros puntos del interior del país “que la justicia electoral deberá analizar”.
Según el funcionario, más del 80 % del padrón concurrió a votar, un porcentaje considerado alto.
“A medida que ingresen telegramas escaneados al correo va a comenzar el escrutinio provisorio”, puntualizó el ministro.
Se esperar contar con al menos 10% de los votos computados de la capital y las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba antes de dar a conocer los primeros datos oficiales.
Macri intenta prolongar su presidencia cuatro años más en un contexto de caída de la actividad económica e inflación y Fernández aspira a reemplazarlo en el poder con el apoyo de los votantes que desean la reinstalación de políticas que mejoren el bienestar social.
En las elecciones se eligen presidente y vicepresidente, gobernadores de tres provincias, jefe de gobierno de Buenos Aires, 130 diputados nacionales, 24 senadores nacionales y alcaldes regionales.
Además compiten otros cuatro candidatos que representan espacios desde la izquierda hasta la derecha y que tienen un apoyo muy limitado.
Para ser elegido presidente es necesario alcanzar al menos 50% de los votos o por lo menos 40% y una diferencia de diez puntos respecto del segundo candidato más votado.
AP