Dijo además que República Dominicana produce ya el 85% de los alimentos que consume, y que en cinco años también la pobreza rural extrema pasó de 14.5% a 4.1%
ROMA, Italia. –
El presidente Danilo Medina explicó, en su intervención ante el 42° período de sesiones del Consejo de Gobernadores del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA), como la pobreza rural ha pasado del 51% en que se encontraba en 2013, al 25.6% con que cerró 2018.
En el mismo período, la pobreza rural extrema pasó de 14.5% a 4.1%
En un encuentro dedicado a “Innovaciones e iniciativas empresariales en el mundo rural”, Danilo Medina explicó lo importante que ha sido para la República Dominicana avanzar en 4 ejes simultáneamente: asociatividad de los pequeños productores, acceso al crédito, mejora de las infraestructuras y acceso a la propiedad de la tierra, mediante la entrega de títulos.
Transición de economía de subsistencia a empresarios agrícolas
Estas estrategias combinadas, han logrado que miles de campesinos pasen de tener una economía de subsistencia a ser verdaderos empresarios agrícolas.
Soberanía alimentaria
Al mismo tiempo, han hecho posible que la República Dominicana produzca ya el 85% de los alimentos que consume, convirtiéndose así en uno de los países que están más cerca de lograr la soberanía alimentaria de todo el continente.
“La República Dominicana está entre los cuatro únicos países de América Latina donde el hambre se redujo consecutivamente en los últimos tres años, según datos de la FAO”, señaló el Presidente, y eso es posible gracias a que nuestro campo aumenta la producción año tras año.
Apoyar al campo, prioridad del gobierno dominicano
El Gobernante explicó que siempre fue una prioridad apoyar al campo, porque era donde se presentaba con mayor crudeza la desigualdad, como pasa en la mayoría de los países del continente.
“Lo cierto es que, en América Latina, la única estrategia válida y sostenible contra el hambre y la pobreza es la revitalización del campo, comenzando por el fortalecimiento de los más vulnerables y garantizando su inserción en cadenas de valor agroalimentarias”.
Aseguró también que, en países como República Dominicana, “se puede
lograr un modelo innovador, que mejore sustancialmente las condiciones de vida de la gente, con acciones que están al alcance tanto de los gobiernos como de los productores”.