Juan Pablo Uribe, presidente de la Comisión Permanente de Efemérides Patrias, al valorar la vida de uno de los miembros de la trilogía patriótica por excelencia de los dominicanos, aseguró que, Francisco del Rosario Sánchez, es el resumen épico del amor a la Patria.
En la organización y proclamación de la separación e independencia del yugo haitiano desarrolló un rol cimero, con el que inicia su camino a la inmortalidad y patentiza su nacionalismo. Con su feroz oposición a la jugada vende patria de Pedro Santana y la anexión a España se enfrenta a los traidores, y con sus compañeros de lucha e ideales certifica la dominicanidad combatiente y se convierten en restauradores adelantados al grito de Capotillo de 1863.
El comunicador y filósofo manifestó que Francisco del Rosario Sánchez, es la expresión viva de una existencia sumergida en el frenesí del activismo político en pos de un sentido nacional y personal trascendente. A los 27 años, con un liderazgo bravo, anunció la noche del 27 de febrero de 1844 ¡Separación, Dios, Patria y Libertad, República Dominicana! A los 44 años, en 1861, se eleva a los altares gloriosos de la Patria, señalando el camino de la rebelión contra la anexión a España. Aquí se produce su expresión valerosa, intrépida, digna, amorosa y de acero: “Entro por Haití porque no puedo hacerlo por otra parte; pero si alguien pretendiese mancillar mi nombre por eso, decidle que yo soy la Bandera Dominicana”.
La muerte sacrificial de Sánchez y los dominicanos perennes encarnados en la hora suprema del 4 de julio de 1861, es manantial, si así lo queremos 161 años después, donde saciar la sed de valores que nos engrandezcan como nación civilizada, soberana y democrática.
Hoy 4 de julio la Comisión Permanente de Efemérides Patrias, el Ministerio de Defensa y la Gobernación de San Juan desarrollaron un amplio programa de actividades cívico-patrióticas, en San Juan de la Maguana, donde fue fusilado el patricio.