Redacción elDigital.com.do
El expresidente Hipólito Mejía, acompañado de sus hijos Ramón Hipólito, Lissa, Felipe y Carolina Mejía, así como demás familiares y amigos cercanos, dio el último adiós a doña Rosa Gómez de Mejía, su compañera de vida durante 62 años.
Doña Rosa fue sepultada este miércoles en una ceremonia privada, en el cementerio Jardín Memorial, lugar que ella misma eligió como su última morada hace apenas día.
Previo, el presidente Luis Abinader, la primera dama Raquel Arbaje, la vicepresidenta Raquel Peña y el ministro Administrativo de la Presidencia, José Paliza, rindieron guardia de honor por dos minutos ante el féretro.
La eucaristía fue oficiada por monseñor José Dolores Grullón Estrella, por el arzobispo de Santo Domingo, monseñor Francisco Ozoria, y el obispo de Higüey, Jesús Castro.
«Doña Rosa será siempre, en el memorial de la historia, el modelo de la primera dama por excelencia», dijo monseñor Grullón Estrella.
La despedida de Lissa y Ramón
Lissa Mejía, destacó la labor de de su madre por mantener la unidad familiar y su fe en Dios, mientras que Ramón narró cómo ella eligió el lugar en el que fue sepultada.
«Como cosas de la vida, no sé porqué razón, vino hace unos días aquí y dijo que querían que la enterraran debajo de una mata. Cuando vine ahora… es Gurabo, es Jacagua, este es su campo. Ella creció en esto. Quiso descansar aquí», dijo