Plan International
Facebook es la red social donde más acoso sufren (39%), pero lo cierto es que ocurren en todas: Instagram (23%), WhatsApp (14%), Snapchat (10%), Twitter (9%) y TikTok (6%).
Casi un 60% de las niñas y jóvenes de todo el mundo han sido víctimas de diferentes formas de acoso online en plataformas de redes sociales, según el nuevo informe “(In)seguras online: experiencias de las niñas y las jóvenes en torno al acoso online”, elaborado por la ONG Plan International, con motivo del próximo Día Internacional de la Niña que se conmemora el 11 de octubre.
Los resultados del estudio, basado en testimonios y entrevistas en profundidad a más de 14.000 chicas de entre 15 y 25 años de 22 países, entre ellos España, revelan que las niñas se enfrentan a experiencias de acoso desde los 8 años, y es entre los 14 y los 16 años cuando lo sufren con mayor frecuencia. Las niñas, adolescentes y jóvenes usuarias de redes sociales están expuestas de forma habitual a esta forma de violencia, que incluye la recepción de mensajes explícitos, imágenes de contenido sexual, ciberacoso, amenazas de violencia física y sexual, comentarios racistas y anti-LGTBIQ+, humillaciones y burlas, y ataques por su aspecto físico.
Los insultos y el lenguaje ofensivo son la forma de acoso más común a la que se enfrentan las chicas, en un 59% de los casos; seguido de humillaciones (41%); comentarios negativos sobre su físico (39%), y amenazas de violencia sexual (39%). En cuanto a las plataformas, si bien las chicas reportan que Facebook es la red social donde más acoso sufren (39%), lo cierto es que ocurren en todas: Instagram (23%), WhatsApp (14%), Snapchat (10%), Twitter (9%) y TikTok (6%). Pese a que estas redes disponen de mecanismos de denuncia y medidas de protección, las chicas entrevistadas consideran que son ineficaces.
“Esta investigación evidencia que, independientemente del contexto socioeconómico y el país en el que vivan, niñas y adolescentes de todo el mundo comparten experiencias de acoso y discriminación en Internet. Estos ataques suponen una amenaza para su libertad de expresión, su participación y su desarrollo. En España, es urgente la aprobación de la Ley orgánica de protección de la infancia y la adolescencia frente a la violencia, y abordar la que se produce en el ámbito digital con una perspectiva de género. Dejar a las niñas y adolescentes fuera de los espacios online es extremadamente perjudicial en un mundo y un mercado laboral en transformación digital, que necesita contar con las experiencias, las opiniones y el liderazgo de las jóvenes», explica Concha López, directora general de Plan International.
El informe concluye que las redes sociales son una parte esencial en la vida de las niñas, adolescentes y jóvenes de todo el mundo y una herramienta utilizada para el activismo, el entretenimiento, el aprendizaje y el contacto con sus amistades y familiares. El 74% de las encuestadas declaran que publican “con mucha frecuencia” o “a menudo” en redes, y las entrevistas sugieren que la COVID-19 ha hecho que ahora estar conectado sea aún más importante.
Aunque una de cada tres, el 35%, asegura haber denunciado a su agresor o agresores, las chicas cuentan que, generalmente, los acosadores se suelen crear nuevos perfiles con los que siguen acosando y, además, es complicado reportar ya que, para hacerlo, se necesita un número significativo de denuncias antes de que las plataformas tomen medidas. En este sentido, la mayoría de las niñas y las jóvenes (44%) consideran que las empresas de redes sociales son quienes más deben aumentar sus esfuerzos y medidas para protegerlas, seguidas por los gobiernos (18%), otros usuarios (18%) y la policía (13%).
Los resultados de la investigación se presentan el lunes 5 de octubre en un evento online retransmitido en directo, que contará con la participación de Meritxell Batet, presidenta del Congreso de los Diputados; portavoces de los distintos grupos parlamentarios; Pilar Llop, presidenta del Senado; Concha López, directora general de Plan International; y jóvenes representantes de Plan International en España que han participado, junto con chicas de todo el mundo, en la redacción de una carta abierta en la que solicitan a Facebook, Instagram, TikTok y Twitter que creen mecanismos más sólidos y eficaces para denunciar el acoso.
La organización lanza #PonteEnMiPerfil, una campaña que cuenta con el apoyo de influencers como Dulceida, la youtuber Inma Franco, la actriz Angy Fernández o la ex concursante de OT Nerea Rodríguez, con la que busca el apoyo de los responsables políticos, los legisladores, las empresas y la sociedad en general para visibilizar el acoso que sufren las chicas como usuarias de redes sociales y poner en marcha medidas para frenarlo.
El acoso online en España
Según los datos de España, donde se han llevado a cabo 1.000 encuestas, las niñas y las jóvenes españolas también están muy expuestas al acoso online: el 88% reconocen que ellas u otras chicas de su entorno se han enfrentado a más de una forma de acoso. La red social en la que las chicas reportan más situaciones de acoso online en España es Instagram 35%; seguido de WhatsApp, con un 28%; y Facebook, el 20%.
Al igual que en el resto del mundo, la forma de acoso online más común a la que están expuestas las niñas en España son los insultos y el lenguaje ofensivo: un 77% de las encuestadas afirma que los reciben “con mucha frecuencia” o “muy frecuentemente”. Les siguen avergonzarlas públicamente o humillarlas por su físico (ambos con un 64%); intimidarlas (61%) y acosarlas sexualmente (58%).
El 75% de las chicas en España dicen que quienes las acosan son personas que conocen del colegio o el trabajo, parejas actuales o anteriores y amistades. De ellas, el 41% dicen que quienes las acosan son personas de su entorno laboral o educativo, un resultado muy diferente si se compara con las respuestas globales, donde solo 23% de las chicas señala recibir acoso de esas personas.
Sobre los motivos del acoso, el 62% de las chicas encuestadas en España dicen que son acosadas por su apariencia física, seguidas por las que creen que sufren acoso debido a su identidad de género (29%), su orientación sexual (29%), su raza u origen étnico (20%), sus opiniones políticas (17%) y su discapacidad (9%).
Cuando se enfrentan a estas situaciones, la mayoría, el 42%, opta por ignorar a la persona que las acosa y seguir utilizan la red social, mientras que solo el 17% se decanta por desafiar al acosador públicamente y el 7% decide dejar de usar la red social en la que ha sido acosada.
Propuestas y recomendaciones
Plan International solicita que, en línea con los ODS de la Agenda 2030, la Convención de los Derechos del Niño y la Convención para la Eliminación de todas las Formas de Violencia contra la Mujer, los gobiernos de todo el mundo apliquen leyes específicas para hacer frente a la violencia online por razón de género y garanticen que las niñas y jóvenes víctimas puedan acceder a la justicia.
En este sentido, en España, reclama la aprobación urgente de la Ley Orgánica de protección integral a la infancia y la adolescencia, que aborda la violencia en entornos digitales, e insta a aplicarla con perspectiva de género para prevenir, investigar, sancionar, reparar y evitar la repetición, en los casos de violencia y acoso online contra las niñas y las adolescentes.
Además, insta al Gobierno a promover políticas inclusivas de acceso a Internet y asegurar la igualdad de género en el acceso a los espacios online; lo que incluye animar a las a las instituciones y empresas de telefonía móvil a habilitar mayor conectividad para alcanzar a aquellas adolescentes y jóvenes que no pueden acceder a la red por motivos económicos, geográficos o de cualquier otro tipo.
Del mismo modo, la organización pide la colaboración de las empresas de redes sociales para que creen mecanismos de denuncia sólidos, efectivos y accesibles, que respondan a las necesidades específicas de las niñas y jóvenes y las protejan, que responsabilicen a los acosadores y promuevan una política de tolerancia cero con el acoso online en sus plataformas.
La organización también hace un llamamiento a los demás actores de la sociedad civil para que se pongan en marcha iniciativas para la educación sobre ciudadanía digital, y se desarrollen campañas para sensibilizar sobre los riesgos a los que se enfrentan la infancia y la adolescencia en Internet, especialmente las niñas, y poniendo especial énfasis en el acoso online.