Casi 32.000 profesionales sanitarios han contraído el nuevo coronavirus en Brasil desde el inicio de la pandemia y cuando el país aún no ha llegado al pico de la enfermedad, según divulgó este jueves el Ministerio de Salud.
Las autoridades sanitarias brasileñas informaron que 199.768 trabajadores del sistema de salud pública presentaron síntomas de COVID-19, de los que 31.790 tuvieron confirmado el diagnóstico para la enfermedad, mientras que otros 53.677 fueron descartados.
Unos 114.300 trabajadores aún son casos sospechosos y están aún bajo investigación.
El secretario sustituto de Vigilancia en Salud, Eduardo Macário, afirmó en una rueda de prensa en Brasilia que, independientemente de si se trata o no de un contagio confirmado, todos los profesionales sanitarios que presenten algún síntoma de COVID-19 deben ser dados de baja para «prevenir la transmisión en el ambiente hospitalario».
Asimismo, afirmó que la pandemia continúa en una fase «creciente» en el país con un aumento sostenido de infectados, por causa de la realización de pruebas y de la alta transmisión del virus en «varias ciudades», y fallecidos.
«No hay perspectiva de estabilización o disminución», indicó Macário.
Aunque el número de profesionales sanitarios con COVID-19 puede parecer bajo comparado con el total, que se estima en alrededor de 3,5 millones, la cifra es preocupante, pues el pico de la pandemia solo se espera que llegue en las próximas semanas.
Hasta este miércoles, Brasil, que tiene una población de 210 millones de personas, reportó cerca de 190.000 contagios de nuevo coronavirus y 13.149 fallecidos, según los datos oficiales del Ministerio de Salud.
Las cifras, no obstante, podrían ser mucho mayores debido a la alta subnotificación y a la demora en la realización de los test, de acuerdo con varios estudios elaborados por científicos brasileños, que calculan el número de contagios por encima del millón.
EFE