Rafael Ramírez
Una pandemia como la que estamos viviendo trae como resultado, una crisis sanitaria, de salud tanto física como mental y también económica, de esta última estaremos hablando.
La crisis económica, trae como consecuencia, desempleo propio o de personas muy próximas, con sus secuelas de escasez, desahucios, pobreza y en el peor de los casos, indefensión y desesperanza. A medida que pasen los días y la situación no mejore, la crisis económica será más crítica.
Lo más importante de esta situación es que la ciudadanía se quede en su casa en cuarentena, como nos informan las autoridades, ya que es la único medio parar el contagio de esta enfermedad.
Todos nos preguntamos, ¿cómo pasaremos días o semanas encerrados en casa?, es importante entender que lamentablemente no se ha encontrado otra manera de controlar esta pandemia. Por lo tanto, debemos de acatar la orden.
Debemos de concientizarnos y estar claro, que producto de este resguardo, el consumo del hogar se disparara y debemos de tomar ciertos controles para que nuestra economía no se vea más afectada de lo que está. Sabemos que este es un problema de todos y que el Estado dominicano conjuntamente con el empresariado de nuestro país, deben de ir tomando medidas para que la crisis no afecte más de lo debido.
Nosotros los ciudadanos comunes, debemos de tener claro qué lograr disminuir nuestro consumo diario no es una tarea difícil, sino que solo hay que trabajar sobre ella, es asunto de proponérselo, sabemos que siempre alguien de la familia está renuente adaptarse al plan de austeridad, pero usted como cabeza de familia debe de tomar la rienda de su hogar en este momento, porque luego vendrán los lamentos y es mejor prevenir que lamentarse.
Parte de las medidas que debemos de tomar sin llegar a los extremos, porque tampoco es afectar nuestra calidad de vida, es mantener apagados los aparatos eléctricos cuando no lo estamos utilizando, como televisores, calentador, abanico, bombillos, aire
acondicionado y que la temperatura ideal para una casa está en torno a los 20ºC, por lo tanto, por cada grado extra, el consumo sube entre un 5% y un 10%, según los expertos.
Así como también racionar el uso del agua, como por ejemplo, cuando tomamos agua casi siempre llenamos el vaso y nos bebemos solo la mitad y la otra se bota y en tiempos de crisis, los productos escasean y más el agua de botellones, pero esto también se aplica a todos los productos básicos de la canasta familiar, “no desperdicio”, verifiquemos que todos los grifos estén bien cerrados; al bañarnos o lavarnos la cara recordar cerrar la llave al momento de enjabonarnos o cuando no se esté utilizando.
Además debemos de hacer una lista de las cosas que realmente necesitamos durante estos días.