La leyenda del fútbol argentino Diego Maradona se descompuso en el estadio de San Petersburgo donde fue asistido tras el partido que Argentina ganó 2-1 a Nigeria y clasificó a octavos de final del Mundial de Rusia-2018, dijeron medios argentinos.
Maradona, de 57 años, fue atendido en el sector VIP del estadio por una «descompensación» de presión tras haberse mostrado eufórico durante el encuentro que Argentina ganó muy cerca del final, agregaron los medios.
En un momento de encuentro, imágenes de la televisión enfocaron al astro mientras estaba dormido en su palco.
Según un video difundido por medios argentinos y de otros países, dos personas ayudaron al campeón mundial de 1986 a desplazarse hasta que fue atendido.
Luego de ser asistido, Maradona fue llevado a su hotel, según el diario deportivo argentino Olé.