Fumar y enfrentarse a altos niveles de estrés en la vida cotidiana son dos factores de riesgo para sufrir un infarto al miocardio, dijo hoy Hugo Ricardo Hernández García, director del Hospital de Especialidades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco.
Agregó que en la actualidad este problema se presenta cada vez más en personas de 30 a 35 años de edad, aunque en su mayoría ocurre en pacientes de entre 50 y 55 años.
“Más aún si lo anterior se asocia a enfermedades crónico degenerativas”, señaló el experto.
De acuerdo con estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), existen alrededor de mil millones de personas en el mundo que son fumadoras y cada año mueren siete millones de personas a causa del tabaco en el mundo.
En México, de acuerdo con cifras de la Secretaría de Salud, poco más de 14 millones de personas son fumadoras activas.
En vísperas a conmemorar el Día Mundial sin Tabaco el 31 de mayo, el también cardiólogo dijo que de cada 10 personas que fuman, seis podrían morir a causa de un infarto al corazón durante la primera hora en que este se presenta.
El experto hizo un llamado para prevenir este tipo de problemas por lo que se debe mejorar la alimentación, hidratarse con agua simple, dejar de fumar y hacer ejercicio diariamente, por lo menos durante 30 minutos continuos.
De lo contrario, los pacientes pueden desarrollar una enfermedad isquémica del corazón (lesiones en los principales vasos sanguíneos del órgano cardiaco), la cual es crónica y solo puede controlarse pero no curarse.
“Además esto vuelve a la persona cada vez más vulnerable ante un infarto agudo al miocardio, cuanto mayor tiempo pase sin acudir al médico para ser diagnosticada”, aseguró.
Hernández García indicó que las enfermedades cardiovasculares son causantes de al menos 18 millones de muertes al año en el mundo, y en México se dan alrededor de 38,000 muertes por esta causa.