El primer ministro de Haití, Garry Conille, anunció este lunes que ordenó la retirada inmediata de varios cientos de policías y soldados de unidades de élite que estaban asignadas a la protección de personalidades importantes para enviarlos a luchar contra las bandas armadas.
El funcionario dijo que esta medida se toma para que estos agentes puedan ser desplegados donde la lucha por la seguridad es más intensa, en las zonas de combate.
«Cada miembro de estas unidades debe ahora contribuir directamente a la defensa de nuestro territorio», dijo el primer ministro tras encabezar una reunión con los altos mandos militares.
El encuentro fue convocado urgentemente para evaluar la preocupante situación que prevalece, particularmente en Puerto Príncipe y la región de Artibonito, zona esta donde hace varias semanas se produjo una matanza en Pont-Sondé.
«Reafirmé firmemente nuestra posición: no cederemos distritos estratégicos como Solino y otras zonas recientemente liberadas. La seguridad de nuestros conciudadanos no es negociable», dijo.
Conille agregó que se reunirá con socios de la comunidad internacional para enfatizar la urgencia de fortalecer la cooperación para apoyar los esfuerzos del Consejo Superior de la Policía Nacional (CSPN) y las Fuerzas Armadas de Haití (FADH).
«Juntos, con el apoyo de nuestros aliados, lograremos restablecer el orden y garantizar la seguridad de todos los haitianos», destacó.
En la reunión también, además de los altos mandos militares, estuvieron otros funcionarios civiles del gobierno haitiano.