La asamblea nacional de la Iglesia votó en febrero permitir al clero bendecir las uniones de parejas del mismo sexo que hayan celebrado bodas o uniones civiles.
Los sacerdotes de la Iglesia de Inglaterra ofrecieron el domingo por primera vez bendiciones oficiales a parejas del mismo sexo, aunque sigue vigente la prohibición de celebrar bodas eclesiásticas para parejas homosexuales, en medio de profundas divisiones en el seno del anglicanismo mundial sobre el matrimonio y la sexualidad.
En una de las primeras ceremonias, la reverenda Catherine Bond y la reverenda Jane Pearce bendijeron su unión en la iglesia de San Juan Bautista, en Felixstowe, al este de Inglaterra, donde ambas son sacerdotes asociadas.
La pareja se arrodilló ante el canónigo Andrew Dotchin, que sostuvo sus cabezas mientras daba «gracias por Catherine y Jane, por el amor y la amistad que comparten, y por su compromiso mutuo al presentarse ante ustedes en este día».
La asamblea nacional de la Iglesia votó en febrero permitir al clero bendecir las uniones de parejas del mismo sexo que hayan celebrado bodas o uniones civiles.
Las palabras utilizadas para las bendiciones, conocidas como oraciones de amor y fe, fueron aprobadas por la Cámara de Obispos de la Iglesia el martes y utilizadas por primera vez el domingo.
El compromiso se alcanzó tras cinco años de debates sobre la postura de la Iglesia respecto a la sexualidad.
Los líderes de la Iglesia ofrecieron una disculpa por no haber acogido a las personas LGBTQ, pero también respaldaron la doctrina de que el matrimonio es la unión de un hombre y una mujer.
Los clérigos no estarán obligados a realizar bendiciones a personas del mismo sexo si no están de acuerdo con ellas.
Las bendiciones pueden utilizarse en los servicios religiosos ordinarios.
El órgano de gobierno de la Iglesia también ha elaborado un plan para «servicios de oración y dedicación» separados para parejas del mismo sexo que se asemejarían a las bodas, pero aún no se ha aprobado formalmente.
Las encuestas de opinión pública muestran sistemáticamente que la mayoría de la gente en Inglaterra apoya el matrimonio entre personas del mismo sexo, que es legal desde 2013.
La Iglesia no alteró sus enseñanzas sobre el matrimonio cuando cambió la ley.
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, ha dicho que no bendecirá personalmente a ninguna pareja del mismo sexo porque su trabajo es unificar a los 85 millones de anglicanos del mundo.
Welby es el líder espiritual tanto de la Iglesia de Inglaterra como de la Comunión Anglicana mundial de la que es miembro.
Varios obispos anglicanos de África, Asia, América Latina y el Pacífico declararon tras la decisión de febrero que ya no reconocen a Welby como su líder.
AP