Redacción elDigital.com.do
José Ramfis Domínguez Trujillo logró que la Junta Central Electoral (JCE) aprobara el reconocimiento político de su partido Esperanza Democrática (PED), con lo que le da ‘luz verde’ para postularse como candidato presidencial para las elecciones del 2024, 62 años después de que su abuelo, el dictador Rafael Leónidas Trujillo Molina, fuera ajusticiado, tras permanecer 30 años dirigiendo el país durante la Era más sangrienta que han vivido los dominicanos.
Ramfis Domínguez Trujillo, hijo de Angelita Trujillo, la hija favorita del dictador, sometió la solicitud del reconocimiento del Partido Esperanza Democrática (PED), en el 2021, dos años después fue reconocido por la JCE
Un comunicado de prensa explica que el reconocimiento fue otorgado “Por haber cumplido con todos y cada uno de los requisitos que establece la ley y que lo convierte en sujeto activo y pasivo de derechos y obligaciones, pudiendo realizar, en lo adelante, todos los actos jurídicos que fueren necesarios o útiles para los fines propios”.
La JCE adoptó la decisión a través de la resolución 24-2023 en el que se indica que el expediente de reconocimiento fue sometido en el año 2021.
«Moralidad, equidad, nacionalismo…» así reza su eslogan, mientras que, el de su abuelo,, quien presidía el Partido Dominicano, era «Rectitud, Libertad y Trabajo»
Ramfis Trujillo presentó, por primera, sus aspiraciones para convertirse en presidente del país en diciembre del 2017 bajo el Partido Democrático Institucional, los fines de competir en las elecciones de 2020.
Dos años después salió de ese partido y llegó a un acuerdo con el Partido Nacional de Voluntad Ciudadana (PNVC), quien lo proclamó como su candidato a la presidencia.
Sus intentos presidenciales fueron invalidados por la Junta Central Electoral y el Tribunal Superior Electoral (TSE), porque este no había renunciado a su nacionalidad norteamericana, adquirida por nacimiento, además por no residir en el país durante los diez años previos a su postulación al cargo al que aspiraba, como lo establece el artículo 20 de la Constitución dominicana.