Dina Boluarte pidió al Parlamento “una tregua política para instalar un gobierno de unidad nacional”.
La nueva presidenta no pertenece a ningún partido. En enero pasado fue expulsada de Perú Libre luego de sostener discrepancias públicas con el fundador y secretario general de esa agrupación, Vladimir Cerrón.
La nueva presidenta del Perú, Dina Boluarte, se comprometió en su primer discurso a encaminar al país, sumergido en una crisis política agudizada en los últimos meses.
Boluarte asume el cargo en reemplazo de Pedro Castillo, quien fue vacado por el Congreso de la República horas antes, luego de intentar dar un golpe de Estado.
Como primer anuncio, la nueva mandataria convocó a “un amplio proceso de diálogo entre todas las fuerzas políticas representadas o no en el Congreso”.
Los nueve partidos con representación en el Parlamento son Perú Libre, Fuerza Popular, Acción Popular, Alianza para el Progreso, Avanza País, Renovación Popular, Somos Perú, Juntos por el Perú y Podemos Perú, aunque en el Parlamento hay 13 bancadas.
Otros partidos con inscripción vigente son el Partido Morado, el Partido Patriótico del Perú y el Partido Frente de la Esperanza 2021. Además, hay otras 15 organizaciones políticas en proceso de inscripción.
La nueva presidenta no pertenece a ningún partido. En enero pasado fue expulsada de Perú Libre luego de sostener discrepancias públicas con el fundador y secretario general de esa agrupación, Vladimir Cerrón.
El último presidente de la República que no contó con partido político ni bancada oficialista fue Martín Vizcarra, vacado por el Congreso en noviembre del 2020.
Compromisos y pedido de tregua
Boluarte aseguró que es imprescindible “retomar la agenda de crecimiento económico con inclusión, social” e impulsar el “empleo digno”. Para lograr ese y otros objetivos, pidió al Parlamento “una tregua política para instalar un gobierno de unidad nacional”.
Además, señaló que “de manera impostergable” se debe trabajar en la “reforma política que nuestro país requiere urgentemente”, aunque esa tarea recae principalmente en el Congreso.
La nueva presidenta señaló que su gestión enfrentará a la corrupción “en todas las escabrosas dimensiones”.
La lucha contra la corrupción es una eterna promesa incumplida. Boluarte aseguró que su primera medida será solicitar el apoyo de la Fiscalía de la Nación y la Procuraduría Pública “para ingresar sin medias tintas a las estructuras corrompidas por las mafias al interior del Estado”, para que estas “impulsen investigaciones y sanciones rápidas”.
Además, anunció la conformación de un Gabinete Ministerial “de todas las sangres, donde estén representadas todas las fuerzas democráticas”.
Boluarte integró la mayoría de los gabinetes del gobierno de Pedro Castillo, con el cargo de ministra de Desarrollo e Inclusión Social, cuando las denuncias por corrupción ya llegaban a diversos ministerios, a Castillo y su entorno familiar. Solo dio un paso al costado cuando se formó el Gabinete presidido por Betssy Chávez.
En su primer discurso, la nueva presidenta también se dirigió a las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional. “Les digo: confíen en que el gobierno que se inicia respetará su misión constitucional, que guarda relación con la seguridad de todos los peruanos”.
Por último, se dirigió a “los nadies”, en referencia a los sectores más necesitados. “Me comprometo ante el país a luchar porque los nadies, los excluidos, los ajenos, tengan la oportunidad que históricamente se les ha negado”, dijo.
Previamente, la nueva jefa del Estado marcó distancia de Pedro Castillo, a quien respaldó casi hasta el final de su gestión. “Se ha producido un intento de golpe de Estado, una impronta promovida por el señor Pedro Castillo, que no ha encontrado eco en las instituciones de la democracia y en la calle. Este Congreso de la República, atendiendo al mandato constitucional, ha tomado una decisión y es mi deber actuar en consecuencia”, dijo.