Domingo Ortiz, quien llegó pequeño a Estados Unidos desde la República Dominicana, se enroló en el bajo mundo, fue arrestado y condenado en 1991 a 49 años y seis meses en la cárcel por múltiples cargos de narcotráfico, pandillas, armas, extorsión, fue indultado por el presidente Barack Obama, abrió ayer martes el restaurante “El Sabor del Café Deli Restaurant” en la ciudad de Jersey City, con la asistencia de destacados líderes y activistas locales, y legisladores municipales y estatales.
Ortiz, de 56 años de edad, mostró orgulloso el certificado de indulto que le entregó la Casa Blanca y como parte de su gratitud, puso una foto del ex mandatario en una de las paredes más visibles del negocio, al lado de la suya.
Obama lo liberó faltando pocos meses para salir de la Casa Blanca y esta semana, le envió una carta de felicitación por su iniciativa como nuevo emprendedor y le deseo muchos éxitos.
“Recuerda aferrarte a los valores que te guían y mantén la confianza en ti mismo, y sé que estaré apoyando a ti y a tu equipo en cada paso del camino”, le escribió el ex presidente.
También agradeció al ex gobernador de Nueva Jersey, Jim McGreevey, quien creó un grupo de nuevas oportunidades para los presos y su reinserción en la sociedad y le dio el apoyo.
“Este es mi sueño hecho realidad”, dijo Ortiz, con los ojos llenos de lágrimas, cuando inauguraba el restaurante.
El negocio, ubicado entre las tiendas “Larry’s Liquors” y “Above Average”, en la calle Martin Luther King Drive, comenzará a servir pollo guisado, arroz, moro y una variedad de cocina criolla dominicana e internacional a los clientes desde este miércoles.
Pero abrió sus puertas la mañana de ayer martes para que comieran el ex gobernador McGreevey, la senadora estatal Sandra B. Cunningham y otros líderes locales que alabaron a Ortiz por su cambio del traficante de drogas al propietario de un negocio.
“Cándido ha sido transformado por el estado, a un costo de más de $55,000 por año”, dijo McGreevey.
“De alguien que estaba desconectado de su familia a un esposo de nuevo, de alguien que estaba aislado en la prisión a un líder comunitario y aportando trabajos de reingreso”, añadió el ex ejecutivo estatal.
Ortiz es el tipo de exconvicto que Obama buscó liberar de prisión bajo una iniciativa de clemencia que inició su administración en 2014, después de ser condenado por ofensas generalmente no violentas, cumplió 10 años, recibió una sentencia más dura de la que habría recibido hoy y se portó bien.
Los cargos por los que Ortiz fue condenado
Ortiz, quien llegó a los Estados Unidos desde la República Dominicana con su familia cuando era pequeño, fue declarado culpable de cuatro cargos relacionados con drogas y armas en un tribunal federal en diciembre de 1991 como parte de un caso de trata de personas que involucró a otros 21 acusados.
Él fue sentenciado a más de 50 años tras las rejas, pero la sentencia se la redujeron posteriormente a 44 años. No se esperaba que fuera liberado hasta el 2036, sino hubiera sido indultado por Obama.
La nueva vida de Ortiz se inició en la cárcel, donde comenzó a leer la Biblia. Se matriculó en clases de cocina y luego se convirtió en jefe de cocina en varias cárceles, cocinando para 2.500 reclusos por día.
En agosto de 2016, Obama conmutó su condena, junto con otros 213 reclusos, un número récord de clemencias otorgadas por un presidente en un solo día.
El primero de diciembre de 2016, Ortiz se convirtió en un hombre libre y regresó con su familia a Union City.
“Sabía que Dios iba a hacerlo”, le dijo Ortiz al periódico The Jersey Journal. “Sin Dios, no puedes hacerlo”.
El sistema penitenciario federal remitió a Ortiz al programa New Jersey Re-entry Corp., que preside McGreevey. El grupo lo ayudó a obtener una identificación legal, abandonó la prisión con solo su identificación de recluso, y en cuestión de días consiguió un trabajo en el restaurante Light Rail Cafe de la avenida Randolph.
El grupo también ayudó a Ortiz a conseguir $25,000 en financiamiento para abrir “El Sabor del Café”.
McGreevey dijo que Ortiz fue uno de los aproximadamente 2.000 ex presos ayudados este año por New Jersey Re-entry Corp., que comenzó en Jersey City antes de expandirse a otras ciudades entre ellas Newark, Paterson y Toms River.
El ex gobernador ha pasado años promocionando los beneficios de conectar ex reclusos con servicios como capacitación laboral y tratamiento de adicciones.
Ortiz dijo que quería abrir un negocio en la calle Martin Luther King Drive, un área de Jersey City plagada de drogas y violencia, para enviar un mensaje a hombres y mujeres que podrían estar en el mismo camino que lo llevó a prisión.
“Ahora que cambié mi vida, pueden aprender de mí”, dijo el dominicano.
Para McGreevey, la idea de que Ortiz pudo haber estado encarcelado por otros 18 años, es una mancha en la conciencia nacional.
“Pensar que este hombre pudo haber pasado 49 años y seis meses en prisión es horrible”, dijo.