Por esa razón, los detalles de su vida, tanto personal como criminal, serán siempre objeto de estudio de investigadores e historiadores que tratan de reseñar la vida del capo y las circunstancias que lo llevaron a ser uno de los personajes más oscuros de la historia de Colombia, lo que hace de su biografía algo llamativo para quienes quieren ir un poco más allá de lo que se conoce del temido narcotraficante.
Es de esperarse que la vida de Pablo Emilio Escobar Gaviria, además de estar rodeada de delitos y crímenes inimaginables, también estuviera llena de excentricidades que el negocio de las drogas trae consigo, por lo que lo relevado por Laura Escobar, sobrina del fundador y máximo líder del Cartel de Medellín, para muchos no es sorpresa.
De acuerdo a la información obtenida por el canal Telemundo de Estados Unidos, medio que tuvo acceso a la familiar del capo, la mujer reseñó apartes de las extravagantes y oscuras navidades de derroche y supersticiones de Escobar.
Según reseña el medio, durante la época decembrina para Pablo Escobar los rezos a figuras como el Niño Jesús de Atocha o el Arcángel San Miguel eran obligatorios, dado que a estos santos era a quien el narcotraficante se encomendaba para que no lo encontraran ni las autoridades colombianas ni estadounidenses o alguno de sus muchos enemigos.
Además de esto, parte de los rituales de protección y prosperidad que Escobar ejercía, consistían en “una bolsita roja, de terciopelo, con un cordoncito dorado, y dentro de ella hay cinco elementos: salud, abundancia, prosperidad, amor y gratitud”, que de acuerdo a lo reseñado por Laura Escobar, era para él un amuleto obligado para fin de año y que estaban representados por una moneda de oro, un ojo turco, madera, una piedra y un objeto dorado, elementos que en medio de la entrevista con el mismo medio, dijo que aún conserva.
Personas cercanas a Escobar, siempre han señalado que para el capo su familia era muy importante, por lo que en estas celebraciones, para él era fundamental que toda la familia estuviera reunida, y compartieran de los pasabocas colombianos más tradicionales del la época.
Al respecto del aniversario número 27 de la muerte del narcotraficante colombiano que tuvo lugar a inicios de diciembre, su hijo, Juan Sebastián Marroquín Santos (nombre de nacimiento Juan Pablo Escobar Henao), le dedicó unas palabras a su padre Pablo Escobar a través de su cuenta en Instagram, en la que se puede inferir que a pesar de la crueldad que representa el capo para el mundo, fue un muy buen padre.
“¿Cómo podría decir sin ofender, ni glorificarte, que extraño al padre y no al criminal? TQM Papá. 1949 – 1993 Q.E.P.D.”, dice Marroquín en la publicación realizada en la mencionada red social.
Así mismo, Victoria Eugenia Henao, viuda de Escobar, tampoco pasó por alto este día y también le dedicó unas palabras a quien fuera su esposo, recalcando que su hijo Juan Sebastián Marroquín ha llevado en “alto las banderas de perdón y de esperanza”.
“La vida nos sorprende, te fuiste a los 44 años de vida. Tu hijo va a cumplir 44 años también y nos ha honrado como padres, con su compromiso por La Paz, llevando en alto las banderas de perdón y de esperanza”, fue el mensaje publicado por Henao, también en Instagram.
Fuente: Semana