Redacción elDigital.com.do
La Virgen de la Altagracia los une, la política lo rivaliza. Hoy, en la Basílica de Higüey, la Virgen hizo su parte, unió a través del «abrazo de paz» a políticos que en su día a día viven tirándose los trapitos al sol.
El poder de la Madre Protectora del pueblo dominicano es inmenso, posiblemente afirmaría un feligrés, que desde un asiento trasero observaba.
Luego de que los candidatos presidenciales del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Gonzalo Castillo y Luis Abinader se confundieran en el «abrazo de la paz», de forma natural los demás continuaron.
El nieto del dictador Rafael Leónidas Trujillo, Ramfis Domínguez Trujillo, aspirante a la presidencia por el Partido Nacional Voluntad Ciudadana (PNVC), asistió a la misa e hizo lo propio, «le dio la paz» al presidente de la República, Danilo Medina y a Gonzalo, que se encontraba al lado.