Esta advertencia la hace Brenda Santana, psicóloga, con máster en neuropsicología clínica y especialidad técnica en psicometría
El uso excesivo de celulares inteligentes, tabletas o televisores es vinculado en niños y niñas, en edades tempranas, a déficit de atención, conductas más hiperactivas, retraso en la adquisición del lenguaje y en la función motriz.
Esta advertencia la hace Brenda Santana, psicóloga, con máster en neuropsicología clínica y especialidad técnica en psicometría.
A propósito de que estamos en época de Navidad, y se acerca el Día de Reyes, la especialista formula algunas recomendaciones sobre los regalos para hijos.
“Padres pueden estar considerando regalar móviles o tabletas a sus hijos en estas festividades y no es que sea del todo negativo, pero hay informaciones a tener en cuenta. Por ejemplo, mucho tiempo frente a la televisión ha sido vinculado a déficits de atención en niños pequeños”, precisó.
En su consulta, en el Centro de Asistencia Familiar (CAF), ha tenido casos en los que niños y niñas duran entre 4 y 6 horas diarias usando estos aparatos. Las horas pueden aumentar los fines de semana, entre el televisor, celular y tabletas.
En el CAF ella trabaja con niños y niñas específicamente en el área de neuropsicología.
Tendencia en aumento y salvedad
La especialista advierte que es una tendencia que va en aumento y que preocupa debido a las repercusiones que tiene la exposición excesiva a dichos dispositivos en edades tempranas.
Una salvedad que hace, es que al hablar del uso de dispositivos electrónicos por niños o niñas, es imprescindible saber que el tema tiene varias dimensiones que en mayor o menor medida contribuyen o afectan al desarrollo de los niños.
Se refiere al contenido visto y el formato en que se distribuye (didáctico, entretenimiento, caricaturas, videojuegos, novelas, películas), el tiempo de uso, el tipo de dispositivo electrónico (tabletas, móviles, televisión), el contexto y el acompañamiento de un adulto.
Así, por ejemplo, no tendría la misma repercusión que un niño pase una hora jugando un videojuego violento (inapropiado para su edad) a que se pase una o dos horas en una tableta con una App didáctica/educativa que implique interacción.
Uso excesivo
Respecto al tiempo de uso excesivo de aparatos electrónicos hay posibles repercusiones en sus habilidades cognitivas.
Santana indica que hay evidencia que sugiere que los niños empiezan a comprender el contenido visto en televisión a partir de los 2 años y para estos la exposición temprana a la tv está asociado a dificultades de lenguaje y función ejecutiva (planeación, atención selectiva y sostenida, flexibilidad mental y fluidez verbal).
En niños de mayor edad se ha vinculado a dificultad para focalizar y sostener la atención en tareas específicas y a retraso en la adquisición de su capacidad de lectura.
Interferencia rendimiento escolar
Asimismo, se ha relacionado a dificultades en las capacidades cognitivas que interfiere en el rendimiento escolar y a menor desarrollo de sus habilidades emocionales como se refleja, por ejemplo, en el menor tiempo de interacción entre padres e hijos.
Sin mencionar que se fomenta el sedentarismo, la obesidad, pasividad mental y aislamiento. Incluso los predispone a generar adicción al uso de estos, principalmente en la adolescencia.
Revelación de estudio
Santana cita un reciente estudio publicado en la revista JAMA Pediatrics llevó a cabo pruebas de resonancia magnética en niños de 3 a 5 años.
Encontró que los niños que estaban frente a pantallas por más de una hora por día sin acompañamiento de un adulto tenían un nivel de desarrollo menor de la materia blanca del cerebro, siendo esta una zona crucial en el desarrollo del lenguaje y habilidades cognitivas.
Este es un resultado que implica cambios estructurales en el cerebro en relación al uso excesivo de dispositivos, y comporta mucha mayor gravedad.
Tanto para validar los datos de este estudio y los antes expuestos es imprescindible realizar nuevos estudios pues lo que se han hecho hasta ahora han arrojado informaciones que solo sugieren lo ya dicho.
El uso de dispositivos según edad
La Asociación Americana de Pediatría ha dado a conocer algunos parámetros para limitar el tiempo de exposición de los dispositivos electrónicos, estos son:
– Evitar los dispositivos electrónicos antes de los 18 meses, a menos que sean video llamadas cortas con familiares.
– Entre los 18 y 24 meses aun no es recomendado, pero si los padres desean pueden mostrarle contenido de alta calidad acompañándoles para fomentar la interacción.
– Entre 2 y 5 años no más de una hora por día.
– A partir de los 6 años equilibrar el uso de dispositivos electrónicos con la rutina diaria. Pero sin exceder las dos horas de uso.
Algunas sugerencias
– Propiciar momentos de juego libre. Estimular su creatividad sin sobrecargar su rutina de actividades o buscar llenar espacios de espera o paciencia con el celular o la tableta.
– Padres deben hacer un uso responsable de los celulares para predicar con el ejemplo.
– Supervisar el contenido que ven los niños/as. Procurar que puedan ver contenido de calidad, educativo.
– No desplazar los momentos de interacción social. Y priorizar las actividades al aire libre.
Neuropsicología clínica
La neuropsicología clínica es una neurociencia que integra conocimientos de la neurología y la psicología en un mismo enfoque para estudiar las relaciones funcionales entre el comportamiento y las estructurales cerebrales.
Se ocupa de la evaluación, diagnóstico e intervención tanto en personas sanas como en aquellos con daño cerebral evolutivo o adquirido.
Trabaja con dificultades de aprendizaje, déficits en las habilidades cognitivas (funciones ejecutivas, atención, memoria, lenguaje, habilidad motriz), trastornos de conducta, discapacidad cognitiva.
Incluye a niños y niñas que presenten estas condiciones a raíz de una lesión cerebral como un traumatismo craneoencefálico, maltrato; casos de epilepsia, nacimiento prematuro o TDAH y en niños sanos para potenciar sus habilidades cognitivas.
El abordaje neuropsicológico debe integrar los conocimientos de otros profesionales como psicólogos, neurólogos, psicopedagogos, fisioterapeutas, en función del caso particular.