Redacción elDigital.com.do
Priscila Rivera, una de las queridísimas Reinas del Caribe, abrió su corazón a elDigital,com.do y nos habló de sus perspectivas en las próximas competencias mundiales, del esfuerzo que conlleva ser una atleta de máximo rendimiento, el dolor que siente al desprenderse de su hija cada vez que sale del país y su opinión sobre cuánto debe ganar un atleta.
La capitana del equipo de voleibol femenino Reinas del Caribe explicó que parte de sus compañeras se marcharon ayer para Colorado Springs, donde tendrán un cuadrangular, y que ella, Bethania de la Cruz, Brayelin Martínez, Lisvel Eve Mejía, Annerys Vargas y Brenda Castillo (quien recientemente se fracturó un brazo en un accidente automovilístico) se quedaron en el país descansando y preparándose físicamente.
Una vez las atletas regresen, dice Priscila, saldrán el 3 de septiembre rumbo a Japón, para la Copa del Mundo y en octubre para Puerto Rico. Manifiesta que, en Japón serán 11 partidos, uno diario, por lo que no tendrán descanso ni recuperación.
Dice que las perspectivas para estos dos nuevos retos son muy altas y que la meta es traer de nuevo medallas. «Nosotras vamos con mucha positividad, con ganas de competir y poner el país lo más alto posible», dice.
Nunca me voy a acostumbrar. Para Priscila salir del país y dejar a su hija es un sacrificio enorme al cual nunca se va acostumbrar. «Mi hija tiene 16 años pero yo lo sufro como si fuera una bebé recién nacida, alejarte de tus hijos es como una estocada en el pecho», confiesa.
Pero, al tiempo dice, que cada vez que son recibidas al retornar al país y la forma cómo la gente se vuelcan en cariño entiende que todo el sacrificio vale la pena.
¿Ustedes son bien recompensadas? «¡Ahora si!. Nosotras salimos a jugar con contratos profesionales, por ese aspecto sí vale la pena, ahora aumentaron a 35 mil pesos mensual a los atletas medallistas de oro, que se hará efectivo en septiembre, y lo que nos paga Cristóbal Marte, (director del proyecto de Selecciones Nacionales Femeninas) que también son 35 mil, entonces, ¡ahora si!,dijo.
Ahora, dice: «si ustedes me preguntaran cuánto realmente debe ganar un atleta, les contestaría un millón de pesos mensual, porque es mucho el sacrificio», concluyó.